Charallave, Estado Miranda – Los residentes de Colinas de Matalinda, que abarcan los sectores F1, F2, G1, G2, H1, H2, H3 y H4, han expresado su creciente preocupación por la falta de suministro de agua potable, que ya se extiende por más de dos meses. La situación se ha vuelto crítica, especialmente en la parte alta de Colinas, donde aproximadamente 40 casas en los sectores Araguaney y La Arboleda (también conocido como Terrazas) se ven afectadas.
Según los habitantes, el sistema de bombeo fue desmantelado por Hidrocapital antes de las elecciones, dejando a la comunidad sin acceso al vital líquido. Aunque se recibió un «pulmón» para el bombeo que estuvo en el suelo durante 15 días, los trabajos de reparación han quedado inconclusos, con un hueco abierto para el seguimiento de la tubería que aún no se ha terminado.
Además, la situación se complica con el daño al cableado de CANTV y fibra óptica, lo que representa un riesgo latente, ya que por debajo de la zona pasa una línea subterránea de 13.8 kV que alimenta a Colinas.
Los habitantes han manifestado su agradecimiento por el apoyo recibido en cuanto a la reparación de motores y otros equipos, pero han solicitado información clara sobre la fecha de finalización de los trabajos y la situación real que ha causado la demora. La falta de agua no solo afecta la calidad de vida de los residentes, sino que también ha obligado a muchas familias a recurrir a la compra de cisternas, lo que impacta negativamente su presupuesto económico.
En un oficio dirigido a las autoridades competentes, los habitantes de Colinas de Matalinda han solicitado un pronunciamiento sobre su situación y han expresado su disposición para dialogar y colaborar en la búsqueda de soluciones. «Esperamos que esta situación llegue a un feliz término y que se tomen acciones productivas para nuestra comunidad», concluyeron en su comunicación.
La comunidad permanece atenta a cualquier respuesta que pueda ayudar a resolver esta difícil situación que, reiteran, no depende de ellos.
Vía: Venezuela en contacto