Los 54 adultos mayores de la casa Edad Dorada esperaban ansiosos a los voluntarios de Buen Vecino, el programa de responsabilidad social de Empire Keeway, EK. Agradecerían la reparación de su puerta principal, de los tanques de agua y la instalación de luminarias, pero, lo que deseaban con más emoción era un obsequio que pidieron con mucha energía: una corneta para armar la fiesta en el centro de permanencia geriátrica de la Calle Carlos Gardel, en Cúa, estado Miranda.
Por fin llegó el autobús de @empirekeeway lleno de gente sonriente, cargada de refrigerios y ¡una corneta de sonido profesional! “Nos trataron como a unas reinas, con todas las atenciones. Y ese ‘regalazo’ que ustedes nos dieron, que nos prometieron y nos cumplieron, nos hace más felices porque aquí estábamos como si estuviéramos en un velorio, sin música”, dijo Judith Cota, una de las abuelas.
Mariosca Sanoja trabaja en la casa como promotora junto a siete personas más. “Aquí vienen y pasan el día fuera de sus hogares, practicando manualidades, jardinería y juegos de mesa. Son demasiado bonchones y están agradecidos porque les dieron el regalo que tanto esperaban”. Ahora, la música sonará a todo volumen para la bailoterapia.
Como en cada Buen Vecino, el regalo fue más bien para el talento humano de EK. Colaboradores y aliados conversaron con los abuelos, les cortaron el cabello, compartieron bocaditos, refrescos y bailaron. Como voluntaria, Mirielys Caraballo disfrutó la visita de principio a fin: “aparte de hacer arreglos a la infraestructura de las instituciones, lo importante es llevar amor. Nosotros, en la empresa, estamos formados para tener internamente ese amor que vamos a exteriorizar en las visitas”.
Ensamblamos Bienestar no es solo un lema, es la materialización de la iniciativa social de EK. Para Teresa Richaldy, también voluntaria, Buen Vecino es ir más allá de los objetivos profesionales o comerciales, “es compartir un tiempo agradable, de sonrisas. Ha sido inolvidable venir y formar parte de la caja de los recuerdos en cada uno de los abuelos”.
Comunicaciones Empire Keeway