La mañana del 7 de marzo la noticia, sobre la muerte de “Carlos Capa”, corrió como pólvora en los Valles del Tuy, estado Miranda. Muchos no lo creían, ya que anteriormente, rumores similares a éste se han dejado escuchar. En la morgue de Bello Monte, Caracas, se confirmó que efectivamente el líder hamponil, uno de los 10 más buscados del país, estaba muerto.
El temible delincuente respondía en vida al nombre de Deiber Johan González. Tenía 37 años de edad. Desde hace 15 años se había convertido en uno de los hampones más peligrosos y sonados de la región tuyera. La organización delictiva que dirigía llegó a sumar hasta 100 integrantes; entre hombres, mujeres y adolescentes.
El grupo delictivo era conocido, entre otros delitos, por su modus operandi de estafar a incautos a través de la página Marketplace en Facebook, donde ofertaba la venta de autos. A “Carlos Capa”, el Cicpc lo investigaba por al menos 20 crímenes. Una de sus víctimas fue el también líder de una banda delictiva en Yare, Kelvin Saúl Yánez Muñoz, alias “Saulito”.
Crónica del suceso
La noche de 6 de marzo los delincuentes estaba en los cambuches, que tenían armados entre la zona montañosa de La Pica de Yare, municipio Simón Bolívar y la Urbanización Jardines de Betania en Tomás Lander. Todos estaban armados, como era costumbre en ellos. Unos, conversaban entre sí, mientras compartían unos cuantos tabacos de marihuana. Otros, -los llamados gariteros- montaban guardia para evitar la incursión en el terreno de los enemigos o de la policía.
La noche se fue y dio paso a la madrugada. El sueño venció a los presentes. Cada uno se durmió donde pudo. El silencio era interrumpido por el sonido de luciérnagas y grillos. El amanecer llegó. El grupo no se inmutó. Los delincuentes nunca imaginaron que la policía les llegaría a su terreno. A eso de las 8:00 de la mañana escucharon las primeras voces desconocidas, seguidas de una serie de pasos acelerados.
“Carlos Capa” y sus súbditos comenzaron a correr en varias direcciones. Eran perseguidos de cerca. Aunque los delincuentes llevaban cierta ventaja porque conocían la zona como la palma de sus manos, los policías contaban con el factor sorpresa, estaban en terreno desde las 8:00pm de la noche anterior y situados en puntos estratégicos.
En el lindero entre San Francisco de Yare y Ocumare del Tuy, David, “La Baba” corría con un perro que tenia de mascota. El animal ladró repetidas veces y dejó al descubierto el lugar donde estaba su amo. Éste, al verse descubierto, disparó un fusil que portaba. Las detonaciones dejaron en evidencia su ubicación, por lo que fue el primer blanco de los uniformados, lo balacearon, sin embargo logró escapar.
“Carlos Capa” también disparó a mansalva. Lo hizo con un fusil de asalto, AR-15, calibre 5,56 mm, según la versión oficial. Los disparos develaron su escondite. Los policías buscaron el blanco y lo fulminaron. Recibió varios tiros.
“Se acabó el mito”, dijo meneando la cabeza uno de los funcionarios alrededor del cuerpo inerte de Capa, mientras otros le tomaban fotos para certificar la muerte de uno de los 10 criminales más buscados de todo el país.
Unos metros más adelante cayó muerto alias “Calabary” y alias “El Negro de Soapire” de la banda de “El Gordo”. También, según la policía, intentaron hacerles frente, pero se llevaron la peor parte. Murieron en el sitio.
En medio de la balacera tres integrantes del grupo delictivo lograron huir. La policía los buscaron por cielo y tierra, pero no los ubicaron. Al trío se lo tragó la tierra.
Se supo que “Carlos Capa” antes de morir llamó a una habitante de la Urb. Jardines de Betania para que suspendiera el operativo donde cayó muerto.
Detalles del operativo
El operativo fue iniciado en el municipio Simón Bolívar la noche del 6 de marzo. Un equipo táctico ingresó de manera sigilosa por la empresa PepsiCo, para posicionarse en la zona montañosa y llegar al lugar por donde presumían que escaparía “Carlos Capa”.
También, la presencia policial se extendió hasta la zona montañosa que limita al municipio Simón Bolívar con la autopista Ocumare-Charallave. Es por ello que funcionarios policiales se hicieron presentes en la urbanización Salamanca de Yare y Jardines de Betania en Ocumare del Tuy.
Entre la comisión mixta de organismos actuantes se encontraban funcionarios de la Policía Municipal de Tomás Lander, Dirección Contra la Delincuencia Organizada de la Policía Nacional, Dirección de Inteligencia Estratégica de la Policía Nacional, SEBIN, UOTE, todos encabezados por la Brigada de Apoyo al Campesino de la Policía de Miranda.
Armados hasta los dientes
En el procedimiento los uniformados incautaron un fusil modelo AR-15, calibre 5.56, sin marcas ni seriales visibles; una escopeta serial MU26026B; una pistola, calibre 9mm; una granada serial GPM75; un cargador de fusil AR15 fracturado contentivo de 14 municiones, calibres 5.56mm; cinco cartuchos calibres 12mm; tres cartuchos calibres 9mm sin percutir; 47 conchas calibre 9mm; 9 conchas calibres 7.62×51 e igual cantidad calibres 5.56; un teléfono celular marca Redmi Modelo Xiaomi sin seriales visibles; una soga y una Biblia.
En el lugar fue ubicado un rancho hecho con láminas de zinc y palos donde se escondía el grupo. Había dos colchones, ropa y una especie de fogón improvisado.
Status de la Banda
Con la muerte de “Carlos Capa” la organización delictiva no ha sido desintegrada en su totalidad. Quedan unos cuantos sujetos que están dispuestos a asumir el control de lo que queda y reagrupar a sus integrantes. Entre los sustitutos de “Carlos Capa” están “el Puerco”, “el Wilkermán” y David “La Baba”.
Fuentes Policiales
Vía: La Revista del Tuy
