Jesucristo sufrió y murió para que todos los que creen en Él puedan vivir para siempre como parte de la familia de Dios
Efesios 2.4-10 “4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), 6 y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, 7 para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. 8 Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe. 10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.”
Muchas personas creen que al acumular buenas obras pueden estar bien con Dios. Sin embargo, cuando se trata del pecado, la muerte es el único pago que puede satisfacer la justicia divina (Ro 6.23). Dado que todos pecamos, enfrentamos la eternidad separados de Dios. Pero la gracia, la expresión del amor y la bondad divina hacia quienes no lo merecen, hizo de Cristo la solución. Según Juan 6.29, la única “obra” que tenemos que hacer es creer. La muerte del Salvador nos dio:
• Vida nueva. Nuestro espíritu cobra vida en Cristo en el momento en que reconocemos que somos pecadores y creemos que su muerte pagó por completo nuestra deuda de pecado.
• Libertad. En el momento de la salvación, el poder del pecado sobre nosotros se rompe y quedamos libres de su dominio. Ahora podemos ejercer nuestra nueva libertad y seguir al Señor.
• Seguridad. Cuando aceptamos que somos pecadores y reconocemos el sacrificio de nuestro Salvador como el pago por todas nuestras faltas, somos adoptados para siempre en la familia de Dios para pasar la vida eterna con Él.
Dios, aquel contra quien nos rebelamos, envió a su Hijo para recibir el castigo que nos correspondía justamente. ¿Cómo le agradecerá usted al Señor su gracia salvadora?
Dr. Charles F. Stanley, pastor de la Primera Iglesia Bautista de Atlanta y fundador de Ministerios En Contacto.