Las piezas que tímidamente se colaban en nuestros joyeros obtienen por fin una relevancia definitiva en las tendencias de otoño-invierno 2024-2025. Un fenómeno que se ha repetido con los collares cascada, los brazaletes o los piercings, que ya veíamos vagamente en meses anteriores y que ahora se añaden en todos los estilismos posibles. Una serie de complementos que se recuperan del pasado, con tintes nostálgicos directos de los inicios de los 2000 y la década de 2010 que augura un come back también en el resto de campos de la moda. Se crea así una serie de joyas que acompañarán a la estética ‘boho’ y que la completarán. Y entre todo ello, un equilibrio entre el oro y la plata marcado por el renacimiento vanguardista de los amantes de la moda atemporal.
Los collares cascadas ya fueron una de las tendencias predominantes durante esta primavera-verano y ahora alargan su reinado un poco más. Esta forma de llevar el clásico complemento, basada en la utilización de diferentes longitudes (cada una más grande que la anterior), se consigue a través de collares a los que se les puede dar varias vueltas. Todo un ejemplo del carácter cíclico de la moda, que vuelve a conquistar por ese «efecto cascada» que genera sobre el pecho y que lo hace tan reconocible. Lúcelos con orgullo en sus diferentes variedades y estilos. La fiebre de los brazaletes comenzaba a despuntar a comienzos de año, estos a pesar de ser minoritarios, son una alternativa colorida y en la que predominan tonalidades ocres, desde los rojos hasta los amarillos, pasando por el naranja.
Por otro lado, las perlas llegan a la nueva estación con ánimos renovados. Con una variedad impresionante, se cuelan en pendientes o chokers. Piezas muy diferentes entre sí que cuentan con este elemento común, convirtiéndolas en protagonistas o por el contrario, reduciéndolas a un papel secundario. Los piercing se siguen posicionando en el favoritismo de los más jóvenes, marcando tendencias variadas en distintas partes del cuerpo. Está claro que esta moda es una de las más controvertidas de la temporada. Por su parte, el color viene de la mano de los charms. Una cuerda principal funciona a modo de nexo para pequeños colgantes de distintas tonalidades, cada una representando animales, frutas u objetos distintos. Esta divertida tendencia, que es todo un viaje a la infancia, se trata de un acercamiento informal a la joyería. Perfecta para aquellas que necesiten aire fresco.
Brilla como desees, pendientes, brazaletes, collares… En fin los accesorios, joyería y ese toque elegante que tu outfit marcará aún más tu estilo, no dejes de brillar, pero hazlo bien.
Por Shirley Rocca
